La inflación y la crisis energética han disparado los precios de los materiales.
María del Carmen y Santiago han comprado una casa antigua para hacer una reforma integral, pero el presupuesto que tenían previsto cuando iniciaron el proceso se les ha quedado corto en apenas unos meses. Pensaban invertir unos 80.000 euros, pero calculan que el presupuesto real estará más cerca de los 120.000 euros.
Ahora una reforma media puede costar entre 800 y 1.000 euros por metro cuadrado
Miguel López, responsable de Refordomus
Los expertos calculan que, desde enero, el precio de las reformas en los hogares se han incrementado casi un 30%. Una subida que se ha visto muy afectada por la crisis energética y de los combustibles. Según Pedro Parra, cofundador de la Asociación Nacional de Empresas de Rehabilitación y Reforma (ANERR), algunos materiales como el cobre, el aluminio y el cristal han incrementado sus costes hasta en un 40%. “Los contenedores de obras, básicos en cualquier reforma, han multiplicado por diez su precio”, afirma Parra.
Además, este no es el único factor que está afectando al sector. A los altos precios se suman también la escasez de materiales y la falta de mano de obra, lo que se traduce en retrasos que pueden alargarse meses. En el caso de María del Carmen y Santiago, llevan desde junio esperando poder iniciar las obras y han decidido levantar los suelos ellos mismos para intentar abaratar el coste final de la factura.
Las reformas, un sector en alza
Ahora los precios se cierran a una semana vista
Pedro Parra, cofundador ANERR
Pese a todo, desde la pandemia las reformas en los hogares se han disparado, ya sea a pequeña escala para renovar o mejorar alguna estancia de la casa, como a gran escala con una reforma integral. “Tenemos clientes que ya tienen el próximo año completo”, asegura Parra, quien también recomienda mucha previsión si queremos que las obras tengan el menor precio posible.
Por eso, es clave comprar con la mayor antelación posible y elegir productos que estén en stock, porque aunque las reformas sigan siendo más económicas que la compra de una nueva vivienda, no está previsto que los precios se reduzcan a corto plazo.